Resumen: esta comunicación pretende hacer una síntesis de los valores socio ambientales de la cuenca del río Navia desde que comenzó su uso hidroeléctrico con la construcción sucesiva de embalses y sus consecuencias, la instalación en las riberas del bajo Navia de industrias cuyos residuos fueron y son una fuente de contaminación permanente, y otras actuaciones que fueron devaluándolo con el paso de los años. Por el impacto de los embalses y la calidad de sus aguas, hoy podemos decir que el río Navia es un cadáver hidrológico. Pese a la situación actual y a los desafíos impuestos por la DMA, la Administración no solo no contempla la recuperación y mejora de sus ecosistemas, sino que agrava su situación con un trasvase.
Degradación social y ambiental, embalses, trasvase del Navia.
1. Historia
Hay en la historia de todo río un acontecer de fenómenos de erosión y modificación por avenidas, que se pierde en la noche de los tiempos, y que hacen de cada curso de agua algo único. Pero vino el siglo, de todos conocido, del holocausto sin fin, que hizo de la mayoría de nuestros ríos simples explotaciones hidroeléctricas.
Tres son los embalses que se construyeron en el río Navia: Son muy alargados y dispuestos escalonadamente, de tal forma que ocupan una longitud de cuenca embalsada de más de 70 Km.
Doiras: Construido en 1932, es el primero de estos grandes embalses. Los testimonios de impacto socioeconómico y de identidades rotas que tenemos, son vagos e imprecisos. Sirva decir que los pueblos de esta zona son pueblos deprimidos, con escasos recursos y que sufren un gran despoblamiento.
Grandas de Salime: Construido en 1945, forma una estrecha franja de 30 Km. de agua embalsada. Además del consabido impacto ambiental, la anegación de fincas, parcelas, superficie arbolada maderable, pueblos, iglesias y cementerios yacen bajo sus aguas. Cuando se cerraron sus compuertas, muchas aldeas quedaron aisladas a falta de un puente que las uniera y muchos de los vecinos perdieron sus tierras y sus viviendas a cambio de mínimas indemnizaciones, viéndose obligados a emigrar en su mayor parte a la comarca de A Terra Cha, donde fundaron colonias.
Salto de Arbón: Data de 1967. Es una presa de materiales sueltos y núcleo de arcilla. Situado a tan solo 3 Km. del área de influencia de agua salada (costas), tiene un severísimo impacto sobre la zona del Bajo Navia y el estuario. Impide el paso a las especies piscícolas migratorias, y la regulación arbitraria de caudales es un factor importantísimo en la situación de degradación del estuario del Navia, ya que en momentos muy frecuentes el índice de contaminación aumenta con la disminución a niveles mínimos o incluso ausencia de caudal circulante.
De los testimonios vivos que existen aún se desprende que constituyó un tremendo trauma para los habitantes de sus riberas y del propio río y el estuario. Pese a ser el último en construirse, se hizo sin ningún criterio medioambiental, para “dedicar la totalidad del caudal del río Navia a la producción hidroeléctrica”. Los salmones se agolpaban por miles y la mortandad de éstos fue elevadísima siendo necesaria la construcción de fosas comunes para su enterramiento.
Debido a su estructura de tierra y materiales sueltos, semejante a la malograda presa de Tous, es un motivo de temor permanente para los pueblos asentados sobre las llanuras de inundación, especialmente la villa de Navia. Mantiene permanentemente niveles próximos al 90%, hecho que incrementa su peligrosidad.
2. Impacto de las industrias.
Con la totalidad del caudal dedicado a la producción hidroeléctrica a partir de los años 60, como dijimos con el Salto de Arbón, el Navia pasó de ser el río más salmonero de la Península, a un ejemplo de degradación socio ambiental.
Una industria láctea, Reny Picot, que incumple todas las normativas, que realiza vertidos permanentes y que no parece ser partidaria de tratar ese bien que es el río como otra cosa que su cloaca, vierte diariamente sin una depuración adecuada y con impunidad ante el silencio de la Administración asturiana. Recientemente una iniciativa ciudadana recogió firmas para solicitar al Principado los resultados de los análisis efectuados a raíz de tres episodios de mortandad ocurridos en el mes de Agosto, ya que la Consejería de Medio Ambiente se resistía a dar esa información, solicitada incluso por el Concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Navia.
La planta celulosa ENCE, que aunque ahora vierte por medio de un emisario a una milla de la costa, lo hace sin depurar (todo se reduce a una simple decantación), y tras haber vertido muchos años al río. Por otro lado, son las necesidades de agua de la planta de celulosa las que determinan la suelta de agua desde el salto de Arbón, de manera que en las pleamares la corriente contrarrestre la fuerza de la marea y las instalaciones industriales no se vean afectadas por el agua del mar.
Esto provoca todos los años mortandades enormes en la parada que hace la fábrica para renovar sus instalaciones: al no necesitar sueltas de agua, la eléctrica Viesgo (hoy absorbida por la eléctrica alemana e.On) cierra por completo las compuertas, y si coincide con vertidos de Reny Picot se dan las condiciones para la muerte masiva de plantas y animales acuáticos. También se producen en cualquier fecha en que no hay renovación de agua a causa de la ausencia de caudales ecológicos.
También es notable la influencia que la presencia de una planta de celulosa tiene en la desaparición del bosque autóctono por la plantación de monocultivos de eucalipto, incendios, desertización, afectación de arroyos y ríos en toda la costa y especialmente en la cuenca del Navia.
Un astillero que tiene una intensa actividad pero que periódicamente presiona para que se acometa la construcción de un puerto industrial y la consiguiente ampliación de la salida de la ría, plan que encaja con esa mentalidad de desarrollismo propio de la revolución industrial.
En definitiva, el impacto industrial se detecta en la mentalidad de gran parte de la clase política asturiana y de la ciudadanía, anclada en la idea que cualquier tipo de consideración social y ambiental, que apunte a algún tipo de limitación de la industria o las grandes obras del hormigón, son contrarias al progreso, de carácter extremista ecologista, propia de mentes primitivas, por lo que no merecen ni respuesta.
3. Episodios contaminantes y silencio administrativo.
La contaminación en el estuario del Navia es una constante que se arrastra desde hace ya más de treinta años. Los episodios de mortandad de peces se repiten con una frecuencia alarmante. Cuando se presenta un caso de mortandad y se hacen las correspondientes denuncias, el silencio administrativo es absoluto. Nos consta que los agentes de medio ambiente tramitan la correspondiente denuncia de los hechos, pero a pesar de que estos hechos se repiten, los ciudadanos no tienen ninguna información.
No se hace un cómputo de peces muertos, ni se recogen. En los tres episodios de mortandad del pasado Agosto de 2008, la cifra de peces muertos está a buen seguro muy por encima de las estimaciones iniciales, ya que se observó que los peces pequeños desaparecían antes de ser vistos por el ojo humano, a cargo de gran cantidad de gaviotas que sobrevolaban la ría al amanecer. Cuando los primeros seres humanos (agentes de Medio Ambiente y gente preocupada) aparecían en la ría, solo encontraban peces grandes a los que les habían sido comidos los ojos.
Un fenómeno que tiene lugar en los últimos años en el estuario del Navia es la desaparición de las algas, donde se observa que cada piedra muestra todo su contorno, cuando hace 3 ó 4 años se presentaba toda la ribera con un espeso manto. También señalar que los alevines de diversas especies, se refugian en las pozas que quedan por encima del nivel de la bajamar, y los peces grandes malviven en una ría que ya nadie duda en considerar como una cloaca.
Se arrojan vertidos industriales a cargo de empresas como Reny Picot y la papelera E.N.C.E. También vierte cantidades nada despreciables Astilleros Armón. Los vertidos urbanos de todas las poblaciones de la cuenca del Navia, van directamente al río, así como los vertidos hospitalarios y los lixiviados del basurero comarcal, ya clausurado, pero que arrojará contaminación a las aguas por un tiempo indeterminado.
4. Trasvase en ejecución.
La Confederación Hidrográfica de Norte II (dependiente del Ministerio de Medio Ambiente) ejecuta actualmente un proyecto de captación de aguas del embalse de Arbón hacia un macro-depósito que se ubica en una zona elevada del monte que separa los pueblos de San Pelayo y Arbón. El proyecto también prevé la construcción junto al depósito de una planta potabilizadora por ozonización, desde la que se canalizará el agua hacia los pueblos y villas de toda la costa occidental desde Cudillero hasta Vegadeo. Se trata de una de los cientos de obras que componen el polémico y poco debatido PHN (ley 2001/10 de 5 de julio, BOE nº 161), del cual el trasvase del Ebro es la estrella que eclipsaba otras infraestructuras que, no por tener menor envergadura, resultan menos irracionales.
4.1. Desinformación sobre el proyecto: Es importante conocer el informe de impacto ambiental preceptivo para todo proyecto de estas características, para contrastar debidamente las hipótesis sobre las que necesariamente tenemos que trabajar debido a la falta de información sobre el proyecto. Sin embargo éste fue eximido de la preceptiva evaluación de impacto ambiental por el MMA
- Estudio de la demanda de agua y de los recursos hídricos disponibles
- Justificación de la demanda
- Análisis de diversas alternativas de abastecimiento y elección de la más sostenible.
- Estudio de impacto ambiental y socio-económico
Este proyecto puede tener fuertes repercusiones socio-económicas y ambientales, al carecer de la información necesaria para poder entrar a debatirlo. Ni los vecinos más directamente afectados — de Arbón, San Pelayo, y Navia-, ni, al parecer, los alcaldes y concejales de la zona, dispusieron de la información mínima indispensable. En cualquier caso, los consistorios no se mostraron dispuestos a facilitarla. Lógicamente esta desinformación no puede sino levantar dudas sobre la racionalidad del proyecto y sospechas sobre la existencia de intereses económicos y políticos ocultos e inconfesables.
Los interesados y preocupados por la cuestión sólo han podido conseguir un plano en el que figuran los tres elementos básicos del proyecto: depuradora, depósito y principales conducciones que lo conectan con la zona de captación en el embalse y, a su salida, con la zona costera mediante grandes ejes de distribución. No se dispone por tanto del proyecto completo que ha de contener una memoria en la que se justifique debidamente la necesidad de su realización y las condiciones que demuestren su viabilidad tanto desde el punto de vista de la seguridad como de la racionalidad social, económica y medioambiental.
4.2. Sobre la racionalidad del provecto: Cabe preguntarse en primer lugar si el proyecto responde a una necesidad real presente o futura de abastecimiento de agua en la zona.
Para empezar, es preciso poner en duda la necesidad de esta infraestructura, puesto que se trata de una región en la que la pluviometría media anual es muy elevada y los recursos hídricos se acercan a 14.000 Hm•3 por año. Son, de hecho, los más elevados dentro del conjunto de las cuencas españolas y que además presenta el menor índice de aprovechamiento de recursos hídricos de todas ellas (el 5% en 1995,).
Si bien es cierto que en algunas poblaciones de la costa (como Tapia de Casariego por ejemplo) pueden haberse presentado en momentos muy puntuales algunos problemas de este tipo (en periodos estivales muy secos), ante cualquier proyecto de solución a estas necesidades locales y puntuales, es preciso demostrar, mediante un estudio riguroso, cual es la verdadera demanda de agua. En este mismo caso de Tapia de Casariego, están documentadas pérdidas en los depósitos continuas. En este caso en que no existen perspectivas serias y científicamente probadas que señalen un crecimiento poblacional ni industrial en la zona que pudiera dar lugar a un aumento importante de la demanda de agua.
Es más, datos recientes sobre la evolución demográfica de los concejos del Occidente de Asturias arrojan cifras de pérdida de población muy importantes según datos del Centro Económico y Social de Asturias (CES). Este proyecto está dimensionado para abastecer a una población de 116.000 personas en toda la franja occidental asturiana, cuando la población no supera las 50.000.
Para el cálculo de la demanda deben ser aplicados criterios de sostenibilidad: medidas de ahorro de agua, de reutilización y de buena gestión del agua en general. Como es lógico, el cálculo de la demanda debe contemplar en primer plano la solución de los problemas en las infraestructuras actuales que se traducen en pérdidas muy importantes durante el transporte de agua (el 23'5% en el año 2000, ver anexo 2). Medidas que, como ya se ha dicho, impone la Directiva Marco del Agua de la UE (2000/60/CE).
En el caso en que efectivamente la evaluación de la demanda demostrara la auténtica necesidad de agua, sólo seria aceptable la construcción de un proyecto de dimensiones proporcionales a las necesidades reales y mediante alternativas racionales, esto es:
- introduciendo medidas de racionalización del consumo (Nueva Cultura del agua)
- mejorando el estado de las canalizaciones existentes para evitar las grandes pérdidas que ocasiona su mal estado actual
- realizando captaciones locales, micro presas, etc.
Pero esto no se ha hecho y lo que es peor, ninguna administración implicada se plantea hacerlo, ni para este proyecto ni, mucho menos, para plantear políticas del agua en el futuro.
4.2. Las posibles consecuencias:
4.2.1. Impacto socio-económico:
4.2.1.a)Este proyecto puede interferir en el propio desarrollo local, cuya orientación, a parte de la agrícola y ganadera tradicional, se dirige actualmente a la explotación turística (turismo rural de montaña) y deportiva (zona de entrenamiento y campeonatos del equipo nacional de piragüismo). Por otra parte, podría producirse la desincentivación de las inversiones turísticas en la zona, debido también a la presencia de una planta de potabilización por ozono.
4.2.1.b) Existe en la población de Navia una gran preocupación por la Ría, por ser ésta uno de sus principales símbolos de identidad colectiva. De hecho fueron recogidas 3.100 firmas de ciudadanos que se oponen a la realización de esta infraestructura.
4.2.1.c) El estudio de la viabilidad económica del proyecto también ha de tener en cuenta: Que supondrá un coste energético muy elevado dado que obligará a bombear el agua a una altura de 200 metros.
-También debe ser considerado el coste energético nada despreciable que conlleva el bombeo del agua del embalse al depósito así como el funcionamiento de las instalaciones de depuración.
-El elevado coste de la realización de las infraestructuras (se hablaba de 36 millones de euros en un principio, que actualmente se incrementan en 6 millones de euros más, sólo en la primera fase) Esto repercutirá con toda seguridad en un aumento del precio del agua para el consumidor. Téngase en cuenta que en la actualidad el precio del agua consumida es bastante reducido, y en ocasiones simbólico, ya que a la mayoría de las poblaciones el agua es conducida al grifo por gravedad (este es el caso por ejemplo de Arbón y de todo el concejo de Villayón).
4.2.1.d) Muy probablemente la cantidad de zona boscosa y de campos de cultivo afectados puede ser muy importante. Los terrenos afectados (zonas de afectación) tanto por la canalización como por las instalaciones son objeto de expropiación forzosa, y reducen la superficie productiva de los agricultores y ganaderos afectados en toda la franja occidental asturiana.
4.2.1.e) Los bosques están siendo objeto de Concentración Parcelaria por parte de la Administración del Principado de Asturias. Cabe estudiar cuales serían las consecuencias de la zona afectada sobre este proceso de reestructuración de los espacios forestales.
4.2.2. Impacto medioambiental y paisajístico.
4.2.2.a) El proyecto en cuestión plantea numerosas dudas en cuanto a su encaje en la lógica de las políticas ambientales europeas en materia de aguas (Directiva Marco del Agua, aprobada por la UE en diciembre del 2000) que se orientan cada vez más por criterios de sostenibilidad ambiental (Nueva Cultura del Agua). Esta directiva obliga a todos estados miembros a cumplir los siguientes preceptos:
4.2.2.b) la preservación de los ecosistemas acuáticos si no se respeta el caudal mínimo ecológico a lo largo del Navia. La captación del agua del embalse de Arbón y su derivación para suministro doméstico e industrial hará disminuir el caudal del río Navia por lo que será preciso el estudio previo de este impacto en la Marismas de la ría del Navia, considerada por el Plan Hidrográfico Norte II como Zonas húmedas, tramos de río de interés medioambiental y tramos de ríos de interés natural. Cabe sin embargo mencionar que el propio plan de cuenca (artículo 9.j del Anejo II del Plan Hidrológico Norte II. Orden del 13 de agosto de 1999, BOE núm. 205 de 27 de agosto de 1999, Pág. 31873, plantea diversas situaciones en las que no es preciso mantener el caudal ecológico en el cauce del río Navia Algunas de las consecuencias de la reducción del caudal a niveles inferiores al considerado ecológico, son la eutrofización de las aguas, la proliferación de algas, la mortandad de peces, etc. La Ría de Navia quedó ya seriamente afectada por la construcción del embalse de Arbón en los años 60, momento en que, por las conocidas condiciones políticas, no era posible presentar oposición a un proyecto claramente perjudicial para la ría.
4.2.2.c) La garantía de suministro: si se basa la capacidad de suministro en la demanda, sin tener en cuenta si ésta responde a un uso sostenible o no, no se puede garantizar la disponibilidad de recursos para satisfacerla, requiriendo, como hemos subrayado más arriba, un estudio previo de la demanda en términos sostenibles, es decir, teniendo en cuenta los recursos hídricos disponibles y la necesidad de respetar el ecosistema del río y de la ría.
4.2.2.d) La calidad del agua: este punto incide directamente en la ubicación, si llega a realizarse, de la planta de ozonización puesto que, según la directiva, se debe distribuir el agua de la calidad adecuada al uso que debe satisfacer. Por ello mismo, parece más adecuado que un agua que debe circular por una canalización de la magnitud que estamos considerando (más de 50 Km.) no sea potable, sino previa a la potabilización. Dicho en otros términos, una ozonización situada a tan larga distancia de la zona de consumo, difícilmente puede garantizar el mantenimiento de la potabilidad y la calidad del agua después del trayecto.
4.2.2.e) Coste: el coste de la gestión del agua debe repercutir en el coste del suministro. En este sentido, es evidente que la opción de situar la planta de ozonización en la presa encarece el proceso, puesto que de lo anteriormente dicho, se entiende que debería realizarse un segundo proceso de potabilización previo al suministro final, o bien requeriría un tipo de canalización muy costosa con el fin de mantener la calidad del agua.
4.2.2.f) No cabe duda de que la ubicación prevista para estas instalaciones causan un gran impacto visual y una grave agresión al paisaje de la zona. Téngase en cuenta que corona la Vega de Arbón, considerada por los expertos una de las que presentan mayor interés etnográfico de las del Bajo Navia. Supone por consiguiente una grave agresión al patrimonio etnográfico y cultural asturiano, y por ello repercute negativamente en el atractivo turístico de la zona, muy particularmente el del Concejo de Villayón.
4.2.2.g) Otro factor no despreciable a considerar es la contaminación acústica producida por los equipos de bombeo, que pueden resultar molestos para la población y la fauna salvaje, en detrimento del atractivo turístico de la zona.
4.2.2.h) Adicionalmente debe considerarse que la capacidad del depósito (25.000 m3) parece plantearse en el proyecto como la fuente exclusiva de abastecimiento de agua de toda la población a la que va destinada. Cabe preguntarse si esto supone renunciar a aprovechar por completo las fuentes de abastecimiento hoy existentes. En caso de que esto fuera así, supondría un despilfarro irracional de los recursos hídricos y energéticos locales.
4.2.2.i) Impacto en términos de seguridad para la población de Arbón y San Pelayo constituyen una importante fuente de preocupación los peligros potenciales derivados principalmente de la ubicación prevista para el depósito y la depuradora, especialmente frente a una posible rotura del depósito o en caso de producirse una fuga en el depósito de ozono. Este temor se ve justificado por el conocimiento de la rotura del depósito de agua de características similares en Melilla. Se podría, a su vez, citar numerosos ejemplos en que las tecnologías más modernas y sofisticadas (supuestamente más seguras) han fallado ocasionando graves accidentes, con daños personales y materiales.
Otro de los motivos de preocupación para la población reside en la repercusión que el proyecto pueda representar en términos de desarrollo local y sostenible de la zona, por el efecto disuasorio que pueda producir sobre ciertos proyectos de inversión (cultivos ecológicos, turismo rural, etc.)
Ni que decir tiene que el trasvase en ejecución repercutirá muy negativamente porque causará un incremento de la concentración de la contaminación al disminuir el caudal y, por consiguiente, contribuirá a una mayor degradación, hecho que tampoco encaja en la lógica de las políticas ambientales europeas en materia de aguas.
5. Conclusiones.
El río Navia es un ejemplo de aplicación de la mentalidad desarrollista, economicista y cortoplacista del capitalismo occidental y su estado actual un ejemplo de la degradación sociambiental que a nivel planetario padecemos y padecerán futuras generaciones.
Pese a las evidencias que esa situación planetaria presenta, y a la respuesta a las mismas que ciertas normativas europeas plantean, la Administración asturiana continúa claramente supeditada a los intereses empresariales, a la hora de recuperar los sistemas acuáticos.
El empresariado continúa viendo las limitaciones sociales y ambientales a su actividad como impedimentos que la ciudadanía radical pretende imponerles, y no como una forma de mejorar y continuar su actividad.
Socialmente continúan separándose como realidades incompatibles el desarrollo de las actividades económicas por un lado, y las limitaciones y consideraciones socio ambientales por otra.
La obra del llamado “Proyecto de mejora del abastecimiento a los concejos costeros del Occidente de Asturias” es un ejemplo de la permanencia de políticas autoritarias en la gestión del agua: surgió para no perder los fondos destinados al embalse de Caleao, ante la problemática que éste planteaba en los últimos tiempos del gobierno del PP. Al ser una improvisación, no mejora, sino que plantea una infraestructura completamente nueva, no se sometió a debate público, no se justificó en ningún estudio de necesidades y podemos considerarlo una cumbre del despilfarro, al emplear un presupuesto millonario en llevar agua a donde ya la hay y además de calidad.
A pesar de la sensibilización social y de las reclamaciones emprendidas para que se considerasen los supuestos anteriores, el Trasvase de Arbón sigue adelante.
Es muy importante que los casos como los de el río Navia sean denunciados no sólo por las poblaciones afectadas, sino en foros como este, para que las políticas absurdas, derrochadoras, y trasnochadas sean erradicadas cuanto antes.
Autores:
Guzmán DÍAZ CASTAÑEIRA - Ganadero ecológico. Tapia de Casariego
Tomás GARCIA - Doctor en Sociología, profesor de la U.A. de Barcelona
Faustino LOY MADERA - Profesor de Filosofía I.E.S. Galileo Galilei Navia
Nana MONTAÑÉS DE LAS HERAS - Presidenta de la Asociación de defensa rural “La Casa Azul” y Profesora de Biología I.E.S. - Marqués de Casariego, Tapia de Casariego
Amador RODRÍGUEZ GARCÍA - Pescador, Presidente de SALTERNAVIA, Navia.
Publicado en la revista Con Mosca
http://www.conmosca.com/modules.php?name=News&file=article&sid=2251
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